Casa Fausto y Carmen: Se trata de un proyecto de rehabilitación integral, de tal modo que una vez acabada la obra, sólo se reconoce la parte existente por la antigua forma de la cubierta, que se ha respetado íntegramente. La normativa urbanística de la zona, en caso de obra de nueva planta obligaba a la nueva edificación ,a respetar una distancia mínima respecto todos los umbrales de 3 m. Esto suponía en caso de optar por esta vía, perder la posibilidad de obtener un patio trasero de toda la anchura de la parcela, y obtener en cambio un corredor de 3 m. alrededor de la nueva vivienda. Teniendo en cuenta las reducidas dimensiones de la parcela de aproximadamente 540 m2, optamos por aprovechar la situación de volumen disconforme de la edificación actual y crecer sólo el necesario para obtener la máxima superficie permitida en planta, de tal manera que el espacio interior de la parcela quedaba libre de edificación, permitiendo por lo menos una superficie mínima utilizable como patio, donde incluso nos permitió ubicar una piscina. La vivienda se desarrolla en una planta, y está pensada, (por expresa voluntad de la propiedad), para optimizar y facilitar la vida de dos personas que se van haciendo mayores, y que a la vez están acostumbradas a vivir con espacios de grandes dimensions.Para acentuar la privacidad y la insonorización de la vivienda, las aberturas que dan a la calle, están protegidas por unas correderas metálicas con un acabado exterior de piedra de travertino igual al resto de muro aplacado con piedra del mismo material. Esto hace que la vivienda quede protegida del exterior y por el contrario se abre hacia el interior. El espacio principal, el comedor estar cocina, es un volumen totalmente abierto al patio interior, hasta el punto de que interior y exterior, conforman una unidad formal y se confunden. El jardín pasa a formar parte de la vivienda y viceversa.